Construido en 1908 y totalmente restaurado en el año 2004, el emblemático edificio modernista conocido como “Casa Fuster“ obra del famoso arquitecto catalán Lluís Domènech i Montaner, cuyas obras ejemplo del Modernismo han sido declaradas Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Podemos definirlo por lo tanto como el hotel de diseño por antonomasia.
La casa fue un regalo del señor Fuster a su esposa, con la intención añadida de embellecer la ciudad de Barcelona. Fue la obra póstuma del arquitecto en la capital catalana y en su momento se consideró la casa más cara de la ciudad debido a los materiales utilizados, entre ellos mármoles de alta calidad.
La cadena Hoteles Center adquirió el edificio en el 2000 y lo rehabilitó respetando al máximo la originalidad del edificio y, a la vez, potenciando la singularidad y espectacularidad de tan fantástica pieza arquitectónica. El hotel abrió las puertas en el 2004.
La Casa Fuster no tan solo culmina la obra de Domènech i Montaner, sino que es el edificio que, con la máxima dignidad, corona y cierra el barrio del Eixample, y es asimismo representativo del período más próspero y de mayor esplendor de la Barcelona del pasado siglo.
*Información obtenida de internet.
Yo he de añadir que este magnífico edificio está ubicado en los jardines de Salvador Espriu (también conocidos en catalán como Jardinets de Gràcia) justo en el lugar que delimita el barrio tradicional de la Vila de Gracia con el señorío de la Diagonal con el Paseo de Gracia hacia la Plaza de Catalunya.
El lujo, pero a la vez el señorío de sus instalaciones lo hacen compatible el confort, y disfrutar de la terraza con una de las mejores vistas de la ciudad.
La música que he escogido para esta entrada tan señorial, es una canción señorial y dos intérpretes señoriales.
"La señora es un vagabundo" Esta canción es una parodia de la alta sociedad de Nueva York y su estricta etiqueta.
Es una canción del musical Bebes in Arms que fue compuesta por Richard Rodgers hacia el año 1937.
Frank Sinatra y Ella Fitzgerald la convirtieron en un éxito cuando la grabaron en 1950.